El pastor y misionero Charlston Soares, amigo de la familia de Pelé, reveló que el "Rey del Fútbol" buscó a Dios en sus últimos meses de vida y volvió a Jesús antes de morir.
Según el misionero, la ex estrella brasileña se entregaba diariamente a Dios a través de oraciones, alabanzas y predicaciones. El líder cristiano explica que los responsables de traer a Pelé de vuelta a Cristo fueron sus propios hijos.
“Tuve una conversación telefónica con Joshua, el hijo de Pelé. Está muy abatido, pero me dijo: 'Mi alegría es que vamos a encontrar a mi padre con Cristo'. Tienen esta certeza, esto es el consuelo de ellos”, dijo el pastor Charlston.
También reveló que conoció a Pelé en el momento en que la estrella estaba casada con Assíria.
“Empezamos a hacer servicios en la casa de Pelé aquí en São Paulo, en Morumbi, y en estos servicios Pelé tuvo su primer encuentro con Jesús. Entregó su vida a Jesucristo”, testificó el pastor.
Y añadió: “En los últimos años, el rey estuvo un poco alejado de estos temas, pero en el mes de noviembre tuvo un reencuentro con Jesús”.
En un video en Instagram, el misionero Charlston declaró que fue un honor presenciar la reconciliación de Pelé con Dios.
“Días difíciles con la partida del rey Pelé. Pero lo más importante es que su alma ya está con Cristo. El rey Pelé se encontró con el Rey Jesús”, dijo.
“La Biblia dice que ese día será un día de grandes sorpresas. Las personas que pensaríamos que no estarían allí, lo estarán".
El día antes de morir, Pelé se reconcilió con sus nietos Octavio Felinto y Gabriel Arantes, hijos de Sandra Regina, la hija que rechazó el exjugador .
Sandra, ya fallecida, es hija de Pelé y de la sirvienta Anísia Machado. A principios de la década de 1990, presentó una demanda para ser reconocida como la hija de la estrella de fútbol.
Incluso después de la prueba de ADN que prueba la paternidad, el exjugador inició una batalla legal contra Sandra, quien terminó ganando el juicio y puede usar el apellido Arantes do Nascimento.
Según medios, Pelé recibió a sus nietos en el hospital. En una publicación en Instagram, Octavio y Gabriel comentaron el momento, declarando que "todo está en el tiempo de Dios".
"Cometer errores es parte de nuestra vida, no todo son mil maravillas, cada familia tiene peleas y riñas, la nuestra no es diferente, ¡pero hay momentos en que la unidad y el amor son más importantes que nada!", declararon los nietos.
"Doy gracias a Dios por proveer este momento, porque era lo que más soñaba mi madre, hay cosas que unos plantan y otros cosechan y nosotros estamos cosechando. [Queremos] agradecer a todos en mi familia, que fueron extremadamente acogedores y amorosos con nosotros", dijeron.